Lo más leído en los últimos días

BLOGDROCHES Actualidad

Blogs de autor

Políticos

Lecciones no aprendidas

"En la iglesia parroquial de Torrecampo, en la nave de la Epístola hay un muro enjalbelgado donde se ha descubierto parte de una pintura del siglo XV. El párroco, con gesto cansado nos hacía notar despectivamente las desproporciones anatómicas de sus figuras. ¡Qué efecto hubiera producido esta crítica a los contemporáneos del artista que principalmente aspiraban a plasmar en las obras de arte su exaltación religiosa!". Quien así escribe es R. Bernier (¿Rafael Bernier Soldevilla?), que, en un artículo titulado "Divagaciones de un caminante" publicado el 7 de septiembre de 1934 en el diario El Sur, repasa varios "pequeños" atentados contra el patrimonio artístico de Los Pedroches cometidos por quienes deberían ser sus máximos defensores, en una época en la que los bienes monumentales religiosos ya se hallaban suficientemete amenenazados por "los hambrientos con la tea incendiaria".

El sur, 7 de octubre de 1934. Pinchar para leer el artículo.

Se refiere también al expolio del yacimiento de Majadaigleisa, en El Guijo, o a la utilización en la parroquia de esa misma villa de un trozo de guadamecí para proteger el retablo de una gotera. En Pedroche, refiere el autor, una pintura que representaba la imposición de la casulla a San Ildefonso sirve para forrar una alacena donde se acumulan libros y en el coro se destrozó una viga mudéjar para acoplar un órgano. En la iglesia de Santa Eufemia, por fin, hay dos puertas de tracería mudéjar cubiertas "con el clásico verde de las regaderas" y las maderas policromadas de su coro aparecen "cubiertas de puntas de cigarro".

Son apuntes, entre otros mayores, que duelen al articulista, en época convulsa, donde el respeto al legado de la historia apenas existe y la protección de los bienes artísticos se consideran "preocupaciones ociosas de chiflados". En esa tarea destructura colaboraron "no sólo el vulgo que viste mal sino también el vulgo de las llamadas clases directoras". Son lecciones de la historia que todavía no hemos aprendido.

6 comentarios :

Anónimo | miércoles, noviembre 04, 2009 7:21:00 p. m.

Enhorabuena por esta "joyita" de prensa, aunque no se si le da a usted más la razón o se la quita.

Anónimo | miércoles, noviembre 04, 2009 10:13:00 p. m.

Seguro que aquí hay fotos que no conocían ni en sus pueblos de origen

Anónimo | jueves, noviembre 05, 2009 8:27:00 a. m.

Hay destrozos del patrimonio histórico-artístico que se hicieron por gentes enfebrecida y convulsionada por ideologías...Hay otros que se hicieron y se hacen no movidos por ideologías sino por carencia de sentido común, por aberración e incultura...Cuando vemos lo acontecido con las pintadas de la ermiata de San Antonio en pozoblanco o la caprichosa retirada o "robo" del Gallo del Pozo Viejo y las pintadas de Santa catalina o Jesús Nazareno etc.. etc... no son achacable sio a la incultura por un lado y a la falta de orden y vigilancia por parte de la policia. ¿ Es de recibo que el Gallo del escudo local desaparezxca de su lugar con la frecuencia que acontece? ¿ A quien le vamos a culpar de ello? ¿Qué hacer para que esas aberraciones no cundan?

Anónimo | jueves, noviembre 05, 2009 8:38:00 a. m.

pues como todo el mundo, la culpa a zapatero

Comunista desengañado | jueves, noviembre 05, 2009 8:39:00 a. m.

En Plaza Publlica aparece un artículo enviado por Miguel Calero, no de Miguel Calero. Ya son varioslos artículos enviados por este procer de la política local.No comprendo por qué Antonio Jimeno le da tanta cancha, quizá porque es un verdadero demócrata y ca cabida a todo tipo de opiniones, eso le honra al director de Plaza Pública y con ello demustra que los que le acusan de ser de derechas no entinden una papa.
Pero a Miguel Calero en este caso yo le aconsejaría que igual que hicieron con Laura López ellos expongan su dinero y la ayuden a Martínez Inglés a editar su libro sin tener que esperar a que una editorial que no comparte sus ideas se lo publique. Aunque Izquyierda Hundida son cada vez menos, pero poniendo 10 euros cada uno quizá puedan sufragar los gastos de edición del libro de su camarada.

Anónimo | jueves, noviembre 05, 2009 9:27:00 a. m.

En Belalcázar, el convento de los cinco mártires de marruecos, ha sido utilizado como establo y gallinero durante muchos años y de eso no hace tanto tiempo, como mucho seis o siete años, qué aberración!!

Publicar un comentario