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Paco Ibáñez en Hinojosa

Con una iluminación muy deficiente (que impidió ver la cara del cantautor durante casi toda su intervención) y un sonido pésimo (que con frecuencia impedía no ya entender, sino sencillamente escuchar lo que decía o cantaba), anoche nos transportamos en un viaje en el tiempo de la mano placentera y susurrante de Paco Ibáñez. Cuando uno acude a un acto de este tipo, sabe a lo que va, y nada de lo que pase allí puede sorprenderle. Parece que no lo tenían tan claro algunos de los asistentes, que llegaron a increpar al cantor cuando éste, entre poema y canción, expresó sus ideas y sus ideales sin corrección política y tomando partido hasta mancharse. Estamos ya tan habituados a lo neutro, a lo imparcial, a lo equidistante, que escandaliza que alguien conserve su coherencia de tantos años y la exponga en público sin pudor y sin temor. Que Paco Ibáñez critique al PP, a los fachas, a la iglesia, a los ricos, a los curas y a los poderosos, eso va de suyo, se supone que será así y no sé a qué viene la reacción. Vamos, que uno debe tener claras las diferencias entre un concierto de Paco Ibáñez y otro de Bustamante. Esta aceptación de una personalidad singular y de su ideología no presupone por supuesto compartir sus opiniones. Personalmente pienso que hubo referencias concretas fuera de lugar, que ciertas proclamas no pueden ya actuar en el público como lo hacían hace treinta años y que empuñar una bandera republicana en el escenario hoy resulta un acto más patético que subversivo. Pero, como ya he dicho en otras ocasiones, uno acude al acto y lo acepta todo en el mismo lote, y si las cosas hubieran sido de otro modo a como fueron, uno habría salido decepcionado del recital.

Y del recital no salimos decepcionados, sino seducidos de nuevo por la clarividencia y sensibilidad de Paco Ibáñez. Su recorrido por la poesía clásica española fue completo: Arcipreste de Hita, Jorge Manrique, Góngora, Lope de Vega, San Juan de la Cruz, León Felipe, Miguel Hernández, Alfonsina Storni, Pablo Neruda, Rafael Alberti, José Agustín Goytisolo... Con la modulación de voz que siempre hemos admirado, con su ritmo y su cadencia tan personalísimos, en un clima excepcionalmente intimista, Paco Ibáñez cantó, como siempre, las cuatro verdades del barquero que le impone su propia fe, las que viene siendo necesario gritar, para que no se nos olviden, desde que el mundo es mundo ("ya lo decía Aristóteles..."). El problema está en que el poder revolucionario de la poesía ha cambiado mucho últimamente, no sólo porque en general los poetas han abdicado de su obligación de luchar para transformar el mundo, sino porque también el público, hoy, ya, casi al cien por cien de los que llenaban el Auditorio de Hinojosa del Duque, incluso aunque no lo sepan, aunque crean lo contrario, ya conciben la poesía, tan sólo, como un lujo cultural, como un adorno sin pecado, y acudir a este salto en el tiempo de la mano de Paco Ibáñez resulta una concesión esteticista que rápidamente se olvidará mientras se toma una cerveza con gambas a la plancha en una caseta de la feria.

1 comentarios :

Anónimo | sábado, abril 29, 2006 12:44:00 a. m.

paseando por la red,me he encontrado este artículo y como me interesa todo lo relacionado con paco ibañez,me he parado a leerlo.no es demasiado antiguo,pero me suena a prehistoria lo que de mi admirado paco se dice.porqué?pues porque yo también he tenido la desacertada ocasión de asistir a un recital suyo,concretamente el
pasado día 6 del presente
abril en sevilla, con muchas espectativas por mi parte,puesto que desde que lo escuché por vez primera,hace bastante tiempo,hasta la fecha indicada en que lo pude ver en directo,está claro que el tiempo no ha pasado sólo por mí;sabía que no me iba a encontrar al paco del olimpia,por supuesto,conozco su trayectoria artística y social por sus discos y por la prensa;sé de su compromiso de izquierda radical que se mantiene inamovible con el paso del tiempo,cuestión ésta que le convierte en un modelo para mí,que también me mantengo en mi identidad primera porque la considero válida y creo en ella,pese a la sociedad de consumo que me toca vivir.por eso necesito de reafirmarme mediante el ejemplo de otros,seguir luchando por la propia identidad y la libertad.así que entusiasmada me dispuse a asitir a lo que consideraba una misa de confirmación,y paco el sumo sacerdote,así lo creí.hubo un encuentro previo en homenaje a su "venerado maestro",son palabras de paco,brassens,en el xxv aniversario de su muerte.apareció agil y distendido,amable incluso dulce para decir lo que acostumbra siempre que tiene ocasión,es decir:despotricar con mucha educación sobre todo lo que signifique capitalismo,en este caso le dió por los norteaméricanos y su invasión cultural;nos recomendó que les dieramos de lado y no nos dejáramos manipular por ellos,entre otras cosas por el estilo.como digo,estuvo muy amable,contestó todas las preguntas que le hicimos con coherencia y rapidez mental;más se salió por los cerros de úbeda alguno de los que venían con él,pero bueno,a lo que iba;le encontré muy mayor para su edad.parece agotado.luego,al día siguiente fue el recital.y ahí es donde se me cayeron los palos del sombrajo: situada en primera fila,con escalofrio anticipado,presintiendo que abriría con /amor tirano/tuve frio de estupor cuando con un vídeo gigante en el escenario se proyectaron imágenes de la guerra civil.una voz en lata hacía comentarios de fondo como si fuera una crónica de hace un rato.me dieron ganas de llorar.creo que a todos los presentes les pasó lo mismo.luego ya salió él,abrió con amor tirano,también aquí se le veía poco pero con buén sonido aunque su bellísima voz,no da mas de sí.me quedé dolorosamente decepcionada,sentí rabia porque nadie de su entorno le impida seguir viendo que ya no puede cantar, imaginé a mi propio padre y me dolió.no abandoné la sala,pero hubiera dado cualquier cosa por no estar allí.cuando finalizó despues de "galopar"un galope triste y apagado,me sentí aliviada.salí llorando del concierto.se de cantaores de ochentaitantos años que te levantan por alto con sus desgarradas voces,pero no es el caso de mi querido paco.él está acabado.lo malo es que sigue insistiendo,puede que la culpable sea la tal julia su"compañera"y mánager,quien le empuje, pues mucho no debe quererlo si es así.o si por el contrario es el propio paco quien no ve la realidad,tonto no parece pero pensaré que algo le pasa.total:que se me cayó el icono.

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