Estudian la ganadería ovina y caprina como sector estratégico frente a la despoblación en Los Pedroches
La cabaña ovina y caprina podría desempeñar en Los Pedroches "una función medular como actividad agraria que permita un desarrollo territorial sostenible, la conservación de la biodiversidad y el mantenimiento de los valores culturales de la comarca", considerando "estratégico" este sector ganadero para hacer frente a la pérdida de población y el abandono de las actividades agrarias tradicionales, hechos que están repercutiendo de forma notoria en la perdida de elementos paisajísticos, patrimoniales y culturales asociados, como son el hábitat, los cercados, los caminos públicos, la cultura, los oficios tradicionales, etc. A partir de estos presupuestos, los investigadores Ricardo Manuel Luque Revuelto, Daniel Moreno Muñoz y Rubén Giménez García, de las Universidades de Córdoba y Murcia, acaban de publicar un estudio (Revista de Estudios Andaluces, julio de 2024) sobre la ganadería ovina y caprina en Los Pedroches con la conclusión de que podríamos estar ante "un sector clave en dicha comarca desde un punto de vista de la industria agroalimentaria y el comercio, e incluso desde la consideración de nuevas actividades emergentes como el turismo rural y la valorización y gestión del patrimonio cultural y natural". Los investigadores han constatado que Los Pedroches "es la comarca que registra los índices de envejecimiento más desfavorables de Andalucía, con valores que superan el 25,5%".
El estudio determina que la cabaña ovina y caprina en Los Pedroches es, tras la bovina, la más importante en la comarca, que alberga las dos terceras partes del número de explotaciones de la provincia de Córdoba. La cabaña ovina y caprina de Los Pedroches alcanza las 482.256 cabezas según el Censo Ganadero de 2020, lo que supone el 13,13% de la cabaña andaluza (3.670.279 de cabezas) y el 2,58 % de la nacional (18.678.301 de cabezas). A escala municipal, son los municipios de Hinojosa del Duque, Belalcázar y Torrecampo los que mayor número de cabezas crían. Sin embargo, el mayor número de explotaciones se encuentran en Villanueva de Córdoba, Hinojosa del Duque y Pozoblanco. En la última década se ha reducido el número de explotaciones en la comarca, pero se ha incrementado el número de cabezas en 33.666, lo que indica que las explotaciones, aunque son menos, han aumentado su tamaño. Este aumento está afectando al modelo extensivo, que se ve comprometido también con la dimensión más intensiva que está adquiriendo el resto de instalaciones agroindustriales o explotaciones especializadas en el ciclo productivo, como cebaderos, centros de tipificación y mataderos.
Los investigadores estiman que la actividad ganadera de ovino y caprino ha definido en buena parte los rasgos de la comarca a lo largo de los siglos y ha conformado los paisajes actuales, por lo que hoy podría jugar "un papel fundamental como actividad sostenible y que contribuyese de forma significativa a fijar la población", al tiempo que contribuiría a afianzar la identidad comarcal. A su favor cuenta con que es un sector económico que ha logrado mantenerse con una producción importante de carácter extensivo, aprovechando pastos naturales en la dehesa, también en espacios forestales o en rastrojeras en tierras de labor, con la importante labor a favor del abonado natural, la lucha contra incendios y control de plagas que tales usos suponen. La ganadería ovina extensiva, además, puede convivir con la cría del vacuno extensivo y el cerdo ibérico. Su papel medioambiental se refuerza, por ejemplo, con la polinización que realizan al dispersar las semillas mediante sus propias heces o al portarlas en la lana. El predominio de una mano de obra familiar en esta actividad favorece, por su parte, la fijación de la población en las zonas rurales con riesgo de despoblación y además supone un freno a la instalación de macro granjas o empresas internacionales que puedan ejercer un monopolio.
El estudio concluye que esta ganadería "juega un importante papel económico, social y medioambiental y se justifica como una actividad que promueve el desarrollo sostenible en zonas de montaña desfavorecidas en consonancia con la Agenda 2030 del Desarrollo Sostenible y de forma particular con los Objetivos de Desarrollo Sostenible relacionados con la seguridad alimentaria, crecimiento económico y empleo productivo, producción sostenible, cambio climático, o evitar la degradación de tierras y pérdida de biodiversidad". Las líneas de apoyo institucional a la ganadería extensiva tradicional, además, deberían considerar no solo los rendimientos agropecuarios sino también los servicios ecosistémicos que esta actividad proporciona (aspectos de carácter histórico, natural, agrario, arquitectónico, social o cultural).
En conclusión, según el estudio, Los Pedroches poseen recursos endógenos suficientes para liderar o reinventar su propia ruralidad mediante un crecimiento económico sostenible que revierta la despoblación, manteniendo la belleza de sus paisajes y conservando sus patrimonios y señas de identidad, siendo la ganadería sostenible uno de los pilares en los que pueden sustentarse estos propósitos.
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