Crítica
Se queja, quizás con razón, un reciente comentarista (lástima que anónimo) del exceso de crítica que suele encontrar en esta página hacia iniciativas de desarrollo comarcal que, como Naturalocio, exigen un gran esfuerzo organizativo no siempre coronado por el éxito. Yo mismo me he planteado en ocasiones si la línea crítica que sigue Solienses no pudiera tornarse contraproducente para su propio objetivo, que no es más que contribuir modestamente al desarrollo y difusión de los valores culturales de Los Pedroches. Al resaltar lo deficiente, lo imperfecto y defectuoso, pudiera quizás transmitirse una imagen negativa de la comarca, por ocultación de otros aspectos más relucientes y logrados. Pienso, sin embargo, que, sin negar esa tendencia censora inherente y consustancial a Solienses, aquí se han dado a conocer muchos contenidos culturales y sociales que pueden contribuir a formar una idea cabal de lo que Los Pedroches son y quieren ser en este momento, que la crítica hacia actuaciones que se consideran torpes y chapuceras no empaña la exaltación de una imagen comarcal que se quiere nueva y moderna y que precisamente el hecho de hacer hincapié en los aspectos menos logrados de determinadas gestiones viene motivado por una voluntad de que la comarca avance más rápidamente en esa dirección de desarrollo social y cultural. Desarrollo que nunca se logrará a base de conformismo y autobombo, sino, como en los antiguos veranos de la infancia sobre el trillo dando vueltas en la era, con un látigo que al restallar en el aire haga avanzar más rápidamente a la yunta.
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