Fin de ciclo: la Virgen regresa
Fieles sacan en procesión a la Divina Pastora de Villaralto.
Durante los primeros días de septiembre las Vírgenes de nuestros pueblos se pasean por sus calles y caminos dando fin de este modo a un ciclo de celebraciones festivas que se iniciara allá por el mes de abril y que no oculta su deuda con antiguas celebraciones paganas de carácter agrario y estacional. Estos rituales marianos indicativos del fin del verano están vinculados a la fecha del 8 de septiembre (Natividad de la Virgen), aunque muchas localidades -pretendiendo una mayor concurrencia de vecinos ausentes- los han desplazado al fin de semana previo o siguiente. En muchos pueblos, "la Virgen de septiembre" es como la hermana menor de otras celebraciones que con mayor esplendor se realizan en otro momento del año y a las que esta, de algún modo, sirve de colofón. Todas estas fiestas, en su conjunto consideradas, constituyen también una señera marca de identidad comarcal, la del rito popular nunca estrictamente religioso, sino amalgamado con multitud de componentes (lúdicos, sociales, ecológicos...) que las convierten en hitos principales de la vida social de cada pueblo.
La Virgen de Piedrasantas de Pedroche a su entrada en la ermita, ayer.
La Virgen de Consolación de Belalcázar durante el traslado a su santuario.
La Virgen de la Antigua de Hinojosa del Duque regresó también a su ermita el pasado domingo.
[Fotos: PSOE de Villaralto, Punto Radio Pozoblanco, Ayuntamiento de Belalcázar e Historias de Colodronia. Todas las fotos han sido editadas por Solienses]
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