Miscelánea belalcazareña
Fachada de la Casa Grande de los Barga en Belalcázar, tras su restauración en 2005. (Foto: Luis Fernández)
El pasado lunes el diario El Mundo publicó en su sección de Cultura un reportaje titulado "El niño de la Casa Grande de Belalcázar", dentro de una serie dedicada al exilio andaluz. El "niño" es el escritor y periodista Corpus Barga, nacido en Madrid pero muy vinculado a Belalcázar, de donde era su familia paterna. En la Casa Grande pasó parte de su niñez y a ella alude el escritor en numerosas ocasiones a lo largo de su obra. Ya nos hemos referido a esa vivienda en varias ocasiones en Solienses, denunciando su lamentable estado de conservación (por ejemplo, aquí), pero ahora me ha llamado la atención esta frase que aparece en uno de sus libros, refiriéndose a las casas de nuestros pueblos: "Las fachadas están enjalbegadas, limpias, demasiado blancas. Es una blancura que explica algo negro". Como siempre, la reveladora mirada del que viene de fuera.
Esta imagen fue tomada el pasado domingo en Belalcázar, justo enfrente del convento de Santa Clara. La calle conserva todavía un sabor auténtico de antigüedad y sería consejable mirar por que perdure y se mantenga ajeno a las invasiones reconstructoras con las que algunos ayuntamientos conciben el término restauración. No quiero hablar ahora de que, a pesar de ser un domingo por la tarde, no pudimos visitar el convento, ni siquiera el patio primero que antes siempre era de libre acceso, aunque sólo fuera para comprar repostería conventual. Esta vez todo estaba cerrado, sin ningún tipo de indicación horaria, como conviene si se desea ahuyentar el turismo rural. Pero no, en lo que quería detenerme hoy es en esas frondosas parras sobre las fachadas, que conservan una costumbre popular ya absolutamente perdida en todos nuestros pueblos. Esos emparrados, que dan sombra y verdor al cálido verano, eran antes un decorado habitual en muchas calles, y no digo yo ahora que se deban recuperar las ya perdidas, pero constituiría todo un ejercicio de amor a la tradición procurar que no desaparezcan también éstas de Belalcázar, situadas en tan oportuna localización, porque en ellas veo otro eslabón aislado de esa cadena que se deshace ante nuestros ojos y que ya no podemos volver a trabar, pero sí al menos impedir que se desmorone por completo para siempre.
Por cierto, que me llamó la atención el hecho de que en el Ayuntamiento de Belalcázar estuvieran izadas cinco banderas: alcanzo a reconocer la de Europa, España, Andalucía y la propia de Belalcázar, pero ¿la quinta?. ¿Diputación? ¿Mancomunidad?. ¿Alguien puede aportar información al respecto?.
Esta imagen fue tomada el pasado domingo en Belalcázar, justo enfrente del convento de Santa Clara. La calle conserva todavía un sabor auténtico de antigüedad y sería consejable mirar por que perdure y se mantenga ajeno a las invasiones reconstructoras con las que algunos ayuntamientos conciben el término restauración. No quiero hablar ahora de que, a pesar de ser un domingo por la tarde, no pudimos visitar el convento, ni siquiera el patio primero que antes siempre era de libre acceso, aunque sólo fuera para comprar repostería conventual. Esta vez todo estaba cerrado, sin ningún tipo de indicación horaria, como conviene si se desea ahuyentar el turismo rural. Pero no, en lo que quería detenerme hoy es en esas frondosas parras sobre las fachadas, que conservan una costumbre popular ya absolutamente perdida en todos nuestros pueblos. Esos emparrados, que dan sombra y verdor al cálido verano, eran antes un decorado habitual en muchas calles, y no digo yo ahora que se deban recuperar las ya perdidas, pero constituiría todo un ejercicio de amor a la tradición procurar que no desaparezcan también éstas de Belalcázar, situadas en tan oportuna localización, porque en ellas veo otro eslabón aislado de esa cadena que se deshace ante nuestros ojos y que ya no podemos volver a trabar, pero sí al menos impedir que se desmorone por completo para siempre.
Por cierto, que me llamó la atención el hecho de que en el Ayuntamiento de Belalcázar estuvieran izadas cinco banderas: alcanzo a reconocer la de Europa, España, Andalucía y la propia de Belalcázar, pero ¿la quinta?. ¿Diputación? ¿Mancomunidad?. ¿Alguien puede aportar información al respecto?.
5 comentarios :
Sobre la casa de Corpus Barga he oido q un estudiante de arquitectura estaba haciendo su proyecto fin de carrera sobre su rehabilitacion, y algunos miembros del gobierno municipal estaban interesados en estudiar la viabilidad de dicho proyecto,con ayuda de la diputacion y el ministerio de cultura. A ver si es verdad q la arreglan, q nos lo dejamos caer todo y no se mueve un alma.
Como no sea que han puesto en los extremos dos banderas de europa..... pero claro eso no tiene sentido.La quinta bandera no me cuadra.
Alguien de belalcazar que nos saque de dudas.
Las otras dos banderas corresponden a Quito (Ecuador) y Guayaquil (Colombia) ciudades fundadas por Sebastián de Belalcázar, algo más que objetar??
Con respecto al horario de apertura del convento, le comento amigo Antonio que el Domingo por la tarde estuvo cerrado el convento porque las Madres estaban de retiro espiritual en el convento y cuando están realizando estos ejercicios no suelen comunicarse con nadie. Además según me comentan ellas, el convento permanece cerrado hasta cerca de las 6:30 de la tarde xq un mal nacido se ocupaba de amenazarlas por el torno durante entresiesta, por lo que ellas extremaron precauciones.
Un saludo.
Mirando por la prensa digital me encontre con esto http://www.diariocordoba.com/servicios/videos/default.asp?pkid=166 , por lo menos este ya esta cogido con video, habra q ver si dentro de unos años no lo vemos en un renuncio.
me parece despreciable que haya personas que se dediquen a molestar a las monjas clarisas de nuestro pueblo.que se dediquen a hacer cosas buenas y mejorar las posibilidades turisticas de Belalcazar, en vez de destruir aun mas, lo que ya esta más que deteriorado por el paso del tiempo. Un saludo desde Sevilla
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