Nieto Cumplido, el Pedroche y los de Pozoblanco.

Nieto Cumplido, el Pedroche y los de Pozoblanco.

Manuel Nieto Cumplido durante las II Jornadas de Historia Local de Villanueva del Duque [Foto: Portal Villaduqueño].

Durante los días 8 y 9 de junio de 2010, y dentro de su VI Semana de Turismo Rural, tuvieron lugar las II Jornadas de Historia Local de Villanueva del Duque, que contaron con la presencia de eminentes investigadores de la historia y la cultura de la localidad. Ahora, el Portal Villaduqueño ha incorporado el audio con las intervenciones de los ponentes, lo que nos ha permitido escuchar unas interesantes conferencias a las que en su día no pudimos asistir.

Tenía especial curiosidad por conocer las aportaciones de Manuel Nieto Cumplido, Canónigo-Archivero de la Catedral de Córdoba y gran autoridad en la historia medieval de nuestra provincia y, en concreto, de la historia de la Iglesia y su patrimonio. Al escuchar su intervención, sin embargo, he sentido una gran decepción y he pensado en cómo los investigadores y eruditos más solventes de la capital aún siguen considerando en muchas ocasiones que Los Pedroches son una tierra inhóspita todavía sin civilizar y que sólo ellos son capaces de traernos la cultura y el descubrimiento de los rastros de nuestro propio pasado, despreciando por desconocimiento los avances historiográficos que, en la mayoría de los casos realizados por los naturales del lugar, se han publicado durante los últimos años.

Nieto Cumplido plantea su exposición como si nada se hubiera investigado sobre Villanueva del Duque y Los Pedroches desde que, hace ya treinta años, Dionisio Ortiz Juárez, Juan Bernier, Francisco Lara Arrebola y él mismo pasaran por aquí en fines de semana alternos para estudiar el patrimonio monumental de Belalcázar. Y así, por no abundar más, nos ofrece como descubrimiento producto de su investigación para las Jornadas el desciframiento del porqué del nombre primitivo de la localidad "Villanueva del Marqués", ignorando que la solución al enigma aparece ya divulgada hasta en la propia web institucional de la villa.

Su exposición (que asegura haber preparado "concienzudamente, pensando en que sea publicada" y de la que, confiesa, "he quedado muy satisfecho") contiene, sin embargo, los suficientes errores de bulto como para desacreditarla por entero. El primero de ellos ya ha sido apuntado por Milagros Gómez en un comentario a la entrada correspondiente del Portal Villaduqueño: al trazar los orígenes de la actual población de Villanueva, Nieto Cumplido se refiere al poblado del Allozo, pero silencia completamente la existencia de Retamal, localidad asentada en el mismo solar y a la que en 1526 Francisco I de Sotomayor, Conde de Belalcázar, le concede el rango de Villa de Señorío. El desconocimiento de este dato, sin embargo, lleva al canónigo-archivero a afirmar que "Villanueva no existía antes de 1521" o que la parroquia de San Mateo "no puede ser del siglo XV", tal como se viene afirmando, porque la villa tuvo, según él, que fundarse con posterioridad a 1521, año en que el duque de Béjar recibió el título de Marqués de Ayamonte. Tan grave omisión, reveladora de una falta de consulta de la bibliografía reciente sobre el tema, cuestiona el conjunto de su aportación, en la que -sin afán de exhaustividad- encontramos otras imprecisiones como esta: al referirse a los derechos de culto de Torremilano sobre la ermita de la Virgen de Guía asegura que tal privilegio se debe a que "el término de Torremilano con Villanueva del Duque llegaba hasta las puertas de la ermita y nunca estuvo claro hasta ya casi la mitad del siglo XVI cuál era de Villanueva y cuál de Torremilano", a pesar de que es del dominio público que las Siete Villas de Los Pedroches, a las que pertenecía Torremilano, carecieron de término municipal separado hasta ya comenzado el siglo XX.

Pero no quisiera dejar pasar la ocasión sin aludir a otra de las afirmaciones pintorescas de Nieto Cumplido, que uno no alcanzaría a creer que haya sido dicha si no fuera porque la escucha una y otra vez. Al referirse a Hinojosa del Duque como "Hinojosa del Pedroche", el archivero-canónigo explica: "porque todo esto que se inventaron en Pozoblanco con el Valle de Los Pedroches y Los Pedroches, con su periódico de principios del siglo XX... esto nunca fue Los Pedroches, siempre era en singular, el Pedroche, y Pedroche el pueblo era Villapedroche, para diferenciarlo de El Pedroche como comarca, pero los de Pozoblanco se dijeron a hacer el plural y así ha quedado, ya es Los Pedroches...". Juan B. Carpio vendrá en mi auxilio para fijar la fecha exacta, pero no creo errar en exceso si afirmo que ya desde el siglo XVI se impuso la denominación "Los Pedroches", con seguridad aplicada a las Siete Villas, por lo que, al menos en esta ocasión, los de Pozoblanco no tienen la culpa que se les achaca.