Historia de un desencuentro

Historia de un desencuentro

Y dime si
estás conmigo
o contra mí.
("Kamikaze" de Amaral)

La estrategia la señaló el alcalde de Pozoblanco, Benito García, ya desde la primera reunión con la entonces balbuceante asociación "Que pare el tren en Los Pedroches" en enero de 2007. Los ciudadanos deberían marchar "detrás de los alcaldes", que serían los que tienen que "capitanear la reivindicación", como lo venían haciendo, según él, desde hace muchos años. El enfrentamiento se forjó ya en aquel primer encuentro y hasta hoy no ha cesado. En un primer momento la asociación contó con el apoyo y complicidad del alcalde de El Viso, Juan Díaz, pero éste pronto se decantó también hacia el lado que, al parecer, le correspondía.

Desde el principio, asimismo, se le achacaron intenciones políticas a la asociación, seguramente porque a algunos les resultaba imposible de aceptar que alguien dedicara su tiempo y su dinero altruistamente para atender un beneficio colectivo. Se argumentó connivencia con el PP, quizás porque este partido, no teniendo nada que perder y careciendo de responsabilidades de gobierno, se sumó a la causa sin reservas y con total olvido de sus graves omisiones en el pasado, o también quizás porque el Ayuntamiento de Villanueva de Córdoba, donde se localizaba la estación técnica que habría de habilitarse, estaba gobernado por el PP. Fue también el alcalde de Pozoblanco el que desde aquella reunión cargó las tintas sobre la politización de la cuestión.

La historia posterior de la reivindicación ha caminado por estos dos carriles tan tempranamente marcados: los alcaldes primero y rechazo a la politización. El desencuentro vivido durante todo este año y pico entre alcaldes socialistas y asociación viene motivado, precisamente, por esta imposición difícil de cumplir para mentes sanas y despiertas.

Y, sin embargo, el enfrentamiento partidista fue una creación artificial, obra en buena parte de Benito García, cuando, en la reunión mantenida el 11 de octubre de 2007 en El Viso, se descubrió por primera vez la opción de que la estación pudiera ubicarse también en Conquista. Hasta entonces el Ayuntamiento de Conquista había estado gobernado por el PP, pero en las elecciones de mayo de ese año se produjo un cambio a favor del PSOE, con el cual se descubrieron también sus posibilidades como sede ferroviaria y como ariete político. Desde entonces, el enfrentamiento ha permanecido más o menos larvado, como en segundo plano, pero sin desaparecer nunca de la escena: Villanueva de Córdoba frente a Conquista era PP frente a PSOE. La asistencia a regañadientes de algunos alcaldes socialistas a la "romería popular" de febrero en Villanueva de Córdoba se debió fundamentalmente al deseo de que la alcaldesa popular jarota no monopolizara los discursos políticos en vísperas electorales.

La otra lucha, la de a quién corresponde liderar la reivindicación, ha sido siempre mucho más evidente. Los alcaldes, principalmente los socialistas, se han esforzado continuamente en mostrarse con un empuje separado al de la asociación, a la que se le prometió un apoyo económico e institucional luego no cumplido. La última muestra de falta de colaboración, para no ir más lejos en la historia, ha sido su asistencia al pleno del Parlamento de Andalucía donde se debatió la Proposición No de Ley socialista. Los miembros de la asociación tuvieron conocimiento de que la Proposición se iba a debatir prácticamente por casualidad, sin que nadie institucionalmente les informara, a pesar de que para entonces los alcaldes ya tenían acreditada su asistencia y no obstante el compromiso de información mutua que se había acordado recientemente. De hecho, la propia presidenta del Parlamento andaluz, Fuensanta Coves, al recomenzar la sesión plenaria en la cual se iba a debatir la PNL, saludó expresamente a los "alcaldes de Los Pedroches" que asistían desde la tribuna de invitados, sin que, voluntariamente o por desconocimiento, se citara también a los ciudadanos de Los Pedroches que, dentro y fuera del Parlamento, asistían al acontecimiento. La cara de disgusto de varios de los alcaldes por la asistencia de miembros de la asociación era notoria aquella tarde.

Y en este contexto hay que situar la intervención días pasados del teniente de alcalde socialista del ayuntamiento de Conquista en Punto Radio Pozoblanco, acusando a la asociación de engañar a los ciudadanos (por haber defendido, a su entender, sólo la opción de Villanueva de Córdoba) y de perseguir intereses particulares. Puesto que la iniciativa de la entrevista partió del propio Sebastián Cortés, hemos de suponer que detrás se esconde algún tipo de estrategia inspirada quizás desde otras esferas. Sus declaraciones descalificatorias ahondan en la ruptura entre instituciones y ciudadanos y el PSOE provincial debería, tal como ha pedido la asociación, aclarar si respalda o desautoriza las opiniones del concejal Cortés. El hecho de que tres días después de que se realizaran tan graves acusaciones aún no se haya publicado ningún desmentido oficial parece confirmar una de las dos opciones, precisamente la que menos nos gusta.