Olímpicos

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La cucaña, esta mañana.

Con gran afluencia de público se inauguraron anoche en Añora las primeras Olimpiadas Rurales de Los Pedroches. Los actos, que comenzaron con un excesivo retraso, se iniciaron con la actuación de la agrupación musical de viento San Martín, que interpretó diversas piezas ante un público no especialmente atento. Después se presentó el libro Juegos tradicionales en Añora, de Milagrosa Tejedor y Puri Rubio, que ha editado el Ayuntamiento de Añora. En la presentación participaron la autora, Milagrosa Tejedor, el alcalde de Añora, Bartolomé Madrid, el concejal de cultura, Hilario Gil, el técnico de cultura, Alejandro López Andrada, y yo mismo, como cronista oficial de Añora. En otro momento hablaremos más detenidamente de este libro y su presentación (no tengo imágenes de ese acto: es lo que pasa cuando se está al otro lado). Posteriormente se declararon abiertos los juegos, en los que van a participar once equipos de 12 componentes cada uno, y se encendió el pebetero olímpico con un certero lanzamiento de tirachinas. Finalmente, se desarrolló la primera de las pruebas, el matar, con la que tanto jugadores como espectadores se divirtieron de lo lindo, no obstante las primeras polémicas surgidas de las diferentes interpretaciones del juego.

Esta mañana ha continuado el desarrollo de las pruebas, con buen seguimiento de público, a pesar del calor. Mizos, cucaña, lanzamiento de adoquín y carrera de aros han sido los juegos en los que los concursantes han mostrado sus destrezas. En un balance de urgencia podemos sacar ya dos conclusiones: primero, que los participantes se están divirtiendo como niños en la recuperación de estos juegos tradicionales y, segundo, que los no inscritos se están arrepintiendo de no haberlo hecho.


Actuación de la agrupación musical de viento San Martín, anoche.


Vista general de las pistas anoche durante el juego de "El Matar".


La cucaña ha resultado una de las pruebas más difíciles.


Lanzamiento de adoquín.


Carrera de aros.


Detalle de uno de los aros.


Los niños se divirtieron anoche montando en el carro de Pandoro.