La respuesta era obsesión
Obra de Aurelio Teno en el monasterio de Pedrique.
El Ayuntamiento de Pozoblanco ha decidido disolver la Fundación Aurelio Teno, que tenía su sede en el Monasterio de Pedrique. Era un clamor desde hace años que dicha institución estaba muy lejos de cumplir los fines que tenía encomendados y su inexistente productividad no compensaba el gasto económico que su mantenimiento suponía. Sin embargo, visto ahora el procedimiento de supresión de la entidad, uno se pregunta si realmente hubo alguna vez voluntad de que tal Fundación, amparada por el nombre de un artista de fama internacional, se convirtiera en la institución cultural señera que hubiera merecido ser.
Parece evidente que el anterior equipo de gobierno no quiso o no pudo hacer cumplir los fines de la sede de Pedrique, entre los que se encontraban la promoción del turismo rural, la conservación de tradiciones y del legado cultural de Los Pedroches, la creación de un centro cultural a las puertas de la comarca que fuera difusor de técnicas avanzadas de diseño e investigación artística y foco de atracción para iniciativas de jóvenes creadores o la investigación sobre la obra de Aurelio Teno y su patrimonio cultural. El anterior equipo de gobierno no quiso o no pudo alcanzar tan luminosos propósitos, pero el actual, al optar por la disolución inmediata en lugar de enmedar los errores, ni siquiera lo ha intentado, con lo que nunca sabremos si aquella quimérica intención que se expresó al constituir el mecenazgo de Aurelio Teno hubiera sido posible con mejores y más ambiciosos gestores.
Hoy conocemos que el remate de la Fundación no supondrá para Pozoblanco un ahorro significativo. Todos los trabajadores serán absorbidos por el Ayuntamiento, el sueldo del artista permanece y los gastos de mantenimiento de las instalaciones, obviamente, también deberán continuar. Y, mientras, se ha privado a Pozoblanco y Los Pedroches de una herramienta que, bien gestionada, hubiera supuesto un instrumento privilegiado de promoción de la comarca y difusión de la cultura más innovadora. Su desaparición no puede ser nunca una buena noticia para cualquier persona intelectualmente inquieta, porque revela una manera de entender la cultura que nos parece conformista y provinciana. Se tuvo en las manos la posibilidad de crear algo grande y se fracasó por incapacidad o falta de voluntad. O por obsesión. Y Los Pedroches no andan sobrados de artistas como Aurelio Teno para ir despreciando oportunidades.
4 comentarios :
Ambiciosas intenciones y absurda disolución para el ahorro obtenido.
No hubiera sido mejor una refundación? un nuevo director, nuevos aires...
Pero en fin, cada dia se confirma mi pesimista idea de que la Humanidad se va irremediablemente a la mierda, y con ella Los Pedroches.
Puedo hacer una propuesta? la voy a hacer de todas formas: un post sobre el estado actual de excesivamente considerado "Turismo Rural".
Gracias Antonio una vez más
Pues que quieres que te diga, yo soy culturalmente inquieto y para mí ha sido una buena alegría la disolución de este lastre para Pozoblanco. La pena es que no se le pueda quitar la pensión vitalicia a Aurelio Teno, por muy buen e internacional escultor que sea.
Acaso la idea original fue buena, los comienzos fueron buenos, pero el derroche de dinero que se ha realizado en Pedrique a lo largo de los años ha sido inmenso y la repercusión de Pedrique en la vida social de Pozoblanco ha sido francamente nula. Ni siquiera en la zona más cercana a Pedrique, la sierra, se ha dejado notar nada de lo que en su día se planificó.
Aquella compra fue impuesta a golpe de narices y de talón y ahora, después de tantos años, vemos los resultados. Bajo mi parecer ha sido una buena disolución, si no por el ahorro económico que se dará si por el sentido de romper con aquella compra tan criticada en su momento por toda la sociedad pozoalbense.
En cuanto a nuevas refundaciones o actuaciones similares, ahí está el futurible museo de la Salchi. Donde todos los sectores culturales de Pozoblanco dan su beneplácito y apoyo.
Son dos extremos de cumplir con los mismos fines, conservación de tradiciones y los valores culturales de Los Pedroches, pero aquello fue una acción que nació desde las instituciones y en contra de lo que quería el pueblo, una maniobra política y esto, la Salchi, es una actuación que nace desde abajo, desde el pueblo.
Yo también soy de los que pienso que disolver la Fundación Teno era una obsesión PP-PA.
Igualmente digo que el PSOE debió en sus días haber potenciado lo que hubiese sido algo tremendamente positivo para Pozoblanco y Los Pedroches.
Una obsesión del PP y PA y sobre todo del que ha obsesionado a estos: Antonio Jimeno. El PP y PA se lo debían. Es penoso, una fundación siempre es un buen instrumento, el objetivo era genial, pero la voluntad política de quienes se han encargado de liquidarla era un horror para los intereses culturales de Los Pedroches. Lamentablemente es lo que tenemos en Pozoblanco.
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