La ermita de Santo Domingo de Guzmán de Hinojosa del Duque
El domingo 13 de marzo tendrá lugar el acto de entrega del Premio Solienses 2016, que este año se llevará a cabo en la ermita de Santo Domingo de Guzmán de Hinojosa del Duque. A lo largo de estos años hemos organizado la entrega del Premio en lugares significativos de nuestro patrimonio histórico-artístico, con la intención de contribuir de este modo al conocimiento y difusión de nuestros bienes culturales arquitectónicos. En ediciones anteriores, el acto de entrega del Premio se ha realizado en espacios tan atractivos como en el convento de Santa Clara de Belalcázar, el convento de la Concepción de Pedroche, la ermita de San Pedro de Añora, el yacimiento arqueológico de Majadaiglesia de El Guijo, las minas de El Soldado de Villanueva del Duque o el Centro de Interpretación de la Arquitectura Popular de Dos Torres. Este año nos trasladaremos a la ermita de Santo Domingo de Guzmán de Hinojosa del Duque.Ermita de Santo Domingo de Guzmán de Hinojosa del Duque.
Situada en el paraje conocido como "Los Palomares", su construcción suele situarse a principios del siglo XIV, presentando en su composición arquitectónica una estructura típica en las ermitas de la comarca: una sola nave rectangular con tres grandes arcos apuntados de ladrillo que descansan sobre pilares de piedra y sostienen una cubierta con sencilla trabazón de madera a dos aguas. La puerta del lado del Evangelio es gótica en su traza, adornada con dintel plano bajo arrabá apoyado en dos pequeñas ménsulas. La de la Epístola, cobijada tras un zaguán, también es gótica y presenta un arco adintelado de ladrillo con los extremos curvos que remata en un pequeño ángulo conopial. Al exterior no se aprecia más juego de volúmenes que un contrafuerte y la espadaña (junto con una pequeña chimenea moderna que hiere el tejado).
Interior de la ermita vista desde el altar mayor.
En su proximidad se han encontrado diversos restos arqueológicos de la época romana, aunque de poca entidad, lo que llevó a Juan Ruiz (La ilustre y noble villa de Hinojosa del Duque, pág. 88) a considerar esta ermita como el "núcleo céntrico y principal" de la antigua Solia, esa población misteriosa de Los Pedroches romanos que todo historiador local arrastra noblemente hacia su propio territorio.
Además de su significación religiosa, la ermita tuvo durante siglos pasados una gran relevancia en los asuntos civiles, pues en ella se celebraban las reuniones conjuntas de los cabildos de las villas condales de Belalcázar e Hinojosa del Duque para tratar los asuntos de administración referidos a su término jurisdiccional, que era común e indiviso. En estas asambleas, denominadas "cabildos de Santo Domingo", se tomaban acuerdos sobre el aprovechamiento de las dehesas, el remate de los pastos, la delimitación de lindes, la reparación de caminos, seguimiento de pleitos, arrendamientos, etc. Esta función de edificio civil para tratar de los asuntos comunitarios entre las dos villas está representada gráficamente en la ermita con la existencia de dos puertas enfrentadas, por cada una de las cuales, según la tradición, accedían separadamente los representantes de cada villa. Cuando en 1631 Villanueva del Duque adquirió el título de villa comenzó a enviar también sus propios representantes a estas reuniones.
El hecho de que vayamos a realizar en tan significativo lugar el acto de entrega del Premio Solienses debemos agradecérselo a la generosidad de la hermandad titular de Santo Domingo, que quiere de este modo abrir la ermita, recientemente restaurada, a actos culturales que contribuyan a revitalizar un espacio de tanto sabor histórico. La entrega del Premio Solienses se inscribe así dentro de los actos conmemorativos del 40 aniversario de la fundación de la hermandad, que este año ha sido reconocida por el Ayuntamiento de Hinojosa del Duque con la medalla de plata de la localidad.
"Puerta de Belalcázar".
"Puerta de Hinojosa".
1 comentarios :
... A mis ojitos también le hiere esa pequeña chimenea.
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