Presentación del rodaje de El libro de las aguas

Presentación del rodaje de El libro de las aguas

Álvaro de Luna, Pepe Sancho, Gil Parrondo y Ana Diosdado.

Durante la tarde-noche de ayer tuvo lugar en Villanueva del Duque la presentación del rodaje de la película que, basada en la novela El libro de las aguas de Alejandro López Andrada, se comenzará a filmar hoy mismo en diversos pueblos de Los Pedroches. Al acto asistió casi todo el reparto artístico y técnico, desde el director Giménez-Rico a la debutante Elena Furiase, desde Pepe Sancho a la productora Rosa García, desde el director artístico Gil Parrondo al joven protagonista Álex González. Y también estuvieron Ramón Langa, Fernando Luján, Lolita Flores, Álvaro de Luna, Ana Diosdado... En fin, un elenco de artistas que raramente se puede ver tan de cerca en nuestra comarca.

Uno a uno fueron desfilando ante el micrófono directores, productora y actores, que agradecieron al público la acogida y confiaron en que la película sea todo un éxito. Giménez-Rico declaró que "vamos a respetar, si no la letra de la novela, que eso sería un error, sí el espíritu. Es una historia de perdedores, de tristeza de posguerra, de perdón, de reconciliación y de amor". Alejandro, por su parte, confesó sentirse "enormemente feliz" y añadió: "Soy un escritor que escribo de la memoria íntima, de todos los seres queridos que no están, a los que les debo la palabra". Lolita, la más desenvuelta, agradeció la oportunidad que se le daba de trabajar con su hija y se alegró de estar en Los Pedroches, porque -dijo- "me voy a poner morá de jamón". La alcaldesa de Villanueva, María Isabel Medina, finalmente, destacó que el rodaje de esta película "es un gran momento para la comarca de Los Pedroches y para Villanueva del Duque, porque es una buena oportunidad para promocionar nuestro paisaje, nuestros recursos naturales, nuestra cultura y nuestra identidad".

Breve intervención del director, Antonio Giménez-Rico

Breve intervención de Lolita

El acto de presentación ha oscilado, como no podía ser menos, entre el glamour capitalino y la catetez de pueblo. Momentos así habremos de vivir muchos en las próximas semanas, siendo el primero de ellos el que hoy mismo protagonizará el presidente de la Diputación cuando inaugure este pantano, digo, este rodaje, accionando la primera claqueta de la cinta, en una secuencia tan paleta que ni siquiera sería creíble en un guión de Azcona. Pero estas son las servidumbres a las que está sometido el arte y, como dijo Pepe Sancho, viejo zorro en estas lides, si hay que dar las gracias se dan, y especialmente a quien haya puesto más dinero. Para recibirlas allí estaban los alcaldes de los pueblos en los que se rodará alguna secuencia del filme, todos los cuales han colaborado económicamente en la producción. También asistió Marisa Doctor, villaduqueña directora de Canal 2 Andalucía, que justificó la apuesta que la cadena autonómica ha hecho por esta película.

El sabor que el acto deja en el paladar de un observador lejano es agridulce, como todo lo sucedido hasta ahora en torno a esta película, puesto que, frente a la nobleza de la obra artística que pueda surgir de este trabajo (y que no podrá valorarse hasta su estreno), se realza cada vez más el sentido pragmático de la empresa. Pareciera como si, en vez de secundario, el fomento de la comarca, de Córdoba y de toda Andalucía fuera el objetivo fundamental de este empeño, como si lo que se empieza ahora fuera un video promocional donde importara menos el saldo artístico que el contable. No cabe duda de que el rodaje de El libro de las aguas, respaldado por nombres de tanto brillo, significará un impulso de alcance aún desconocido para la promoción externa -fundamentalmente turística- de Los Pedroches (recuerdo ahora que en La Mancha se ha creado la "Ruta cinematográfica de Almodóvar", que transcurre por los lugares que han sido escenario de películas de Pedro Almodóvar), pero a veces gustaría un poco más de calma, algo más de la soledad en la que escribió el autor, menos vanidades, para que el clima "desasosegante, algo mágico, inquietante y algo enigmático" que reclama el director fuera posible y El Libro de las aguas resultante no fuera sólo una pasarela de paisajes y tipos o un cúmulo de tópicos de posguerra, sino una historia con alma, que nos hiciera emocionarnos o conmovernos y sobre todo que, viéndola, se nos olvidara por un momento que ha sido rodada en Los Pedroches.


Pepe Sancho se dirige al público asistente.


Varios alcaldes de Los Pedroches asistieron al acto.


En el centro, Ana Diosdado y Lolita Flores.


Álvaro de Luna es saludado por el numeroso público asistente al acto.


Álex González y Elena Furiase.
[Fotos y archivos de sonido por cortesía de Antonio Jimeno]
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